Situado en la inhóspita región de la depresión de Afar, en el noreste de Etiopía, una inusual fuente de luz y calor emerge desde las entrañas de la Tierra: el lago de lava del volcán Erta Ale. Dicho Volcán es considerado el más activo en Etiopía, con apenas 613 metros de altura pero alcanza en su base un diámetro de casi 30 kilómetros.
En la cumbre, dos grandes cráteres salen a la superficie, uno de ellos es un pozo inactivo, el otro, más pequeño, es uno de los únicos cuatro lagos de lava del MUNDO. El mejor momento para visitar el lugar es sin duda por la noche.
Los lagos de lava, por lo general de origen basáltico, emergen de la superficie a través de un orificio de ventilación, depresión o cráter volcánico, como en este caso en el Volcán Erta Ale. Aún cuando la actividad de este volcán es considerable e incluso se necesita evacuar gente, el turismo ha aumentado considerablemente.
Si bien es cierto que puede ser un tanto peligroso visitar este lugar, también es cierto que el espectáculo que te ofrece sobre todo por las noches es único.
